Los germanos se han puesto por delante rápido, con un 2-0 justo. el primero de Klose, tras fallo monumental en el marcaje, el primero, de Terry, tras saque en largo del portero alemán. Klose ha buscado el balón con fe y su esfuerzo obtuvo el máximo premio ante la mirada atónita de Capello. El segundo es un gol espectacular. En una transición rapidísima Muller pasa y corre buscando el espacio arriba. La pared llega limpia y Terry, a por uvas, vuelve a cometer un error de principiante dejando su zona totalmente desguarnecida. Centro de la muerte y gol de Podolsky. Luego llegó la reacción de los ingleses. Como no podía de ser de otra forma, el gol llegó tras un centro desde la banda que cabeceó libre de marca Upson. Ya digo que el centro de la zaga alemana es uno de sus puntos débiles.
Después llegó el capricho del destino. Gol fantasma tras cañonazo de Lampard. El balón entra y por mucho, pero el línier no lo concede. En la mente de todos el recuerdo de aquel gol fantasma del mundial 66' en el que un gol de Hurst subió al marcador de forma injusta y que sirvió a la postre para que Inglaterra le ganara el Mundial a los alemanes en el mítico estadio de Wembley. El tiempo pone a cada uno en su sitio o al menos, eso dicen.
Tras el descanso los ingleses han salido a por todas y los alemanes algo dormidos. El mediocampo germano ha desaparecido por completo y Özil no conseguía desarrollar su fútbol. Pero el estilo es el estilo. Mientras los ingleses tenían el balón sin saber que hacer con él, los alemanes esperaban como lobos un robo para sentenciar al contragolpe. Y así fue. En un par de contras muy bien confeccionadas, los de Loew han finiquitado por la via rápida el partido, marcando sendos golazos. parece mentira que un equipo de Capello se repliegue tan mal.
Inglaterra debe meditar. Su fútbol está muy lejos de ofrecer el nivel de su liga doméstica. Está claro que los equipos de la Premier van a buscar fuera, todo lo que no encuentran en casa, básicamente calidad en la organización y la creación. Mientras no formen jugadores de esas características, lo tienen complicado. Incluso yo diría que han perdido ese fútbol directo pero de intención. Hoy no han sabido llevar el partido a su terreno, el del juego físico y la ida y vuelta constante. Quizás no es lo suyo que un italiano dirija un equipo inglés, amos, digo yo.
